Las bananas son la fruta número uno en América; 90% de los hogares las compran semanalmente y el norteamericano promedio consume más de 25 libras anuales de ellas. Esto es casi una banana y media por semana. Este número podría crecer pronto debido a que ya no se tendría que preocupar de pelar la cáscara.
Agradezca a una compañía japonesa que desarrolló una nueva banana, una con una cáscara tan fina que puede disfrutar de toda la fruta, incluyendo la cáscara. Se denomina la banana Mongee y se cultiva y cosecha bajo un control de temperatura muy preciso que produce una cáscara fina y comestible en cuatro rápidos meses, en comparación con el proceso anual promedio.
Nuestras propias investigaciones en Dole han demostrado que la cáscara de banana ofrece una variedad de beneficios, incluyendo una concentración más alta de antioxidantes, más fibras, beta caroteno y calcio que la pulpa por sí sola. Estos componentes antioxidantes, que se encuentran en grandes cantidades en la cáscara, se han asociado a una reducción del riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como por ejemplo enfermedades cardiovasculares, diabetes y cáncer.
Tradicionalmente, la cáscara también se ha utilizado para tratar quemaduras, diarrea, inflamación y mordidas de serpiente. Aunque la cáscara es dura y posiblemente desagradable al paladar, un estudio publicado en el boletín Journal of Functional Foods hizo una observación más detallada en los usos potenciales para darnos una guía para investigaciones futuras. Descubrieron que sus beneficios van desde un uso tópico en la medicina tradicional hasta fertilizante para un reabastecimiento del suelo y podría tener un papel importante como ingrediente funcional en la industria alimenticia.
Debido a que la cáscara de banana es una fuente económica y excelente de compuestos ricos, los investigadores están buscando maneras adicionales de extraer sus nutrientes. ¿O quizás la banana Mongee tiene la solución? Aunque no estamos recomendándole que ya comience a comer cáscaras de banana, puede aprovechar los nutrientes de la banana incorporándolos en su dieta. Son una opción evidente para desayunar o cocinar, pero nos gusta experimentar con maneras divertidas de incluirlas en el almuerzo o la cena.